¿Qué hago por ti en La Caja Mensual?

Huyo de todo ese entramado de discurso elevado y precios difíciles de entender para el común de los mortales.
Busco vinos que estén buenos y que cuesten alrededor de 10€.
Que los elaboren enólogos independientes o bodegas sin renombre, ni postín, ni marquesados.
Que tengan una etiqueta y diseño molón (no influye en el sabor pero sí en tu experiencia).
Elijo los que me gustan y los bebo también con mis amigos, que es como te los vas a beber tú. No en una mesa de cata con el culo apretado.
Espero a que se me pase la cogorza.
Conozco a los enólogos, su bodega, su historia, su autenticidad... para poder contártelo bien y que tú puedas contarlo.
Selecciono tres al mes para ti.
Te los mando a tu casa en una caja.
Con un díptico impreso en el que te los presento como nunca nadie te ha presentado un vino.

¿Cuánto vale eso? Piénsalo.

Por 35,90€ al mes es tuyo. Una caja con tres vinos cada mes. Y el díptico por el que muchos están apuntados.

Andaba muy equivocado

Un síntoma claro de que un vino te gusta es cuando al dar el segundo trago ya estás pensando en el tercero.

Pensar en la siguiente copa con la copa aún llena en la mano.

Pensar en la repetición antes siquiera de acabar de disfrutar del momento.

Al igual que sé que un restaurante me gusta cuando en el segundo plato ya estoy pensando en cuándo voy a volver.

O mientras escucho una canción por primera vez en la radio y ya estoy ansioso por meterme en Spotify a ver si ese grupo ha publicado más.

O cuando pienso en cuántos libros habrá publicado ese escritor antes de finalizar el libro que tengo entre las manos.

Desear antes de acabar...

...pensar en lo siguiente antes de terminar; creo que es la única ansiedad que nos debemos permitir.

Según lo probé ya estaba ansioso no solo por la siguiente copa, si no por probar el resto de vinos de esa bodega.

Es un tinto muy potente y cargado de matices, tanto por dentro como por fuera.

Y elaborado con una uva muy peculiar que yo tenía denostada.

Andaba muy equivocado.