Cómo leer una etiqueta de vino sin parecer un sumiller plasta

Valoro mucho que una etiqueta sea bonita.

Hacer una etiqueta bonita cuesta lo mismo que hacer una cara, y aunque no afecta al sabor, sí influye en tu experiencia y predisposición.

Pero hay una parte de la que nadie habla y que te puede dar pistas a la hora de elegir un vino.

Y sin dártelas de enólogo engolado: